Noticias

Curiosidades del rabo de ternera

¿Eres de los que disfrutan al máximo con un buen estofado de rabo de vaca? En Vacacool, te contamos algunos secretos de una de las delicias más famosas de nuestra cultura gastronómica

Se trata de una comida de “pobres” que, con el paso de los años, se ha convertido en una de “ricos”. El rabo de ternera es un guiso andaluz, típicamente cordobés. Hoy, en nuestro blog, te contamos algunos secretos de este manjar.

1.- ¿Sabías que el rabo de toro tiene su origen en la época romana? Ya existían referencias sobre él en el libro De re Coquinaria del gastrónomo romano Marco Gavio Apicio (siglo I d.C).  Hoy en día y, debido a la alta demanda de esta carne, lo normal es hacerlo con rabo de vaca o de buey. ¿El motivo? Muy simple: los verdaderos rabos de toro de lidia están muy cotizados.

2.- Es un plato muy cordobés. La receta más popular de esta pieza data de la Córdoba del s.XVI. Según destacan fuentes históricas, el rabo de toro era una elaboración propia de las clases sociales más bajas. Al parecer, las gentes más humildes de Córdoba esperaban con paciencia a que los diestros dieran final a la vida de los toros bravos para hacerse con ellos. Es una joya gastronómica que consiste en un estofado hecho a base de rabo de vaca, cebolla, vino tinto, tomate frito o especias como la pimienta negra, el pimentón dulce y el clavo.

3.- El rabo de vaca se encuentra pegado a las vértebras finales de la cola del animal. Además, está formado por huesos y cartílagos, por eso es una carne muy gelatinosa, con un sabor muy intenso. Aporta al cuerpo alto contenido en colágeno. También contiene vitaminas del grupo B, que mantienen activo al organismo y lo ayudan a obtener energía de manera más rápida.

4.- El rabo de ternera aporta minerales como el fósforo, el hierro y el calcio. Estos nos ayudan a mantener unos huesos y dientes fuertes, así como prevenir enfermedades como la anemia.

5.- Existen muchas formas de cocinar el rabo de ternera. La más famosa es a la cordobesa, aunque también se puede cocinar acompañado de zanahoria, patatas, puré de patatas, en forma de tartar, con cuscús, con arroz cocido, etc.

6.- Después del cocinado debes de dejarlo reposar por lo menos 2 horas. Y debes tener muy en cuenta, que esta pieza… ¡no soporta bien las cocciones rápidas! Para que el rabo de vaca quede tierno, su cocción no tiene que ser inferior a 6 horas. Aunque la verdad, es mejor cocinarlo de un día para otro. Así le dará tiempo a reposar y a que concentre bien el sabor.

7.- El vino con el que lo guises debe ser un tinto con cuerpo.

8.- En países de América Latina, como por ejemplo Colombia y Venezuela, se emplea este corte para la elaboración del Sancocho, una sopa en la que se mezclan carnes, verduras y condimentos.

9.- Aguanta en la nevera un máximo de 3 días, y nunca se debe deshuesar antes de cocinar.

10.- Lo más importante es la calidad de la materia prima. Apuesta por Carne de Ávila para que el resultado sea un éxito. El rabo de vaca nos lo pueden preparar en la carnicería para que está troceado y sea de buena calidad. Lo lavaremos bien, lo secaremos y lo salpimentaremos.